El pasado 3 de diciembre nos unimos al día internacional de la discapacidad buscando generar espacios accesibles para todos. Por ello, te daremos algunas recomendaciones que seguro te ayudarán muchísimo para evitar accidentes y sobre todo tener una casa inclusiva.
Las casas deben estar en constante cambio para atender las necesidades de quienes las habitan, no es lo mismo adaptar un espacio para un bebé que gatea, que para alguien que presenta algún tipo de discapacidad visual, auditiva o motriz.
El hacer estos pequeños cambios los ayudará a desplazarse con más confianza en los diferentes espacios.
¿Por dónde debo empezar?
Para empezar a planear una casa anti-caídas hay que hacer un poco de análisis personal. ¿La casa va a ser adaptada para una persona que ya vive ahí o será para alguien que acude de visita? ¿Alguno de mis familiares ya tuvo un accidente en casa y hay que prevenir que vuelva a pasar a toda costa? o simplemente porque quieres prevenir antes de lamentar.
También se vale hacer una lista de los requerimientos de la persona que vivirá ahí o nos visitará, ya que dependerá del tipo de discapacidad que padezca el nivel de adaptación que se requiera. Incluso se puede contemplar el acomodo actual del hogar y plantearse nuevos panoramas: ¿Y si se le asigna el cuarto que está cerca del baño para que llegue más rápido? o ¿Qué tal si quitamos el mueble inseguro del comedor?
Una vez teniendo en cuenta lo anterior, será más fácil saber por dónde empezar y si además se toman en cuenta estos pequeños pero muy efectivos consejos, tendrás una casa accesible para todos.
Retira alfombras:
Es más fácil que se atore un zapato o una sandalia en una alfombra suelta que sobre el concreto la loseta cerámica o el vinil. Si vas a instalar alguno procura que sea anti-derrapante.
Tira lo que ya no sirva:
De nada sirve acumular objetos, ropa, muebles, trastes o juguetes que solo ocupan espacio y hasta representan un riesgo de accidente. Guarda lo verdaderamente importante o de valor sentimental, recuerda que otras personas pueden darle un uso mejor, así que no descartes la opción de regalarla o donarla a instituciones que lo necesiten.
Pasillos despejados:
Quita del camino todo lo que pueda provocar un caída: cables, lámparas, banquitos, trapeadores, cubetas, etc. Si limpias la casa, seca bien los pisos y usa limpiadores que no dejen superficies resbalosas o que sean tóxicas.
Más luz para mejor visión:
La clave es tener bien iluminadas todas las áreas de la casa. Instala luces de sensor que se prenden con el movimiento, así no tendrán que preocuparse por buscar el apagador cuando se paren al baño en medio de la noche.
Lo mejor es aprovechar la luz del día con unas cortinas que permitan su entrada, esto servirá para que incluso aprovechen la vitamina D que proviene del sol.
Baño sin desliz:
Las tinas no son la mejor opción. Es mejor tener una regadera con agarraderas en las paredes y un buen antiderrapante en el piso. Los tubos de agarradera también pueden instalarse alrededor del inodoro o en los pasillos que dan al baño.
Señala los relieves:
Si para pasar de una habitación a otra hay un escalón o desnivel, contempla nivelarlo y, si no puedes, señalaro con un color brillante en el suelo.
Por último, acomoda los muebles de forma que no estorben el camino, fija bien los cuadros y artículos decorativos para que no se caigan al suelo y si hay niños o una mascota, evita que haya juguetes en el piso o que puedan obstaculizar el paso.
Estas son solo algunas de las adecuaciones generales,sin embargo,recuerda que según el tipo de discapacidad que se tenga se deberán hacer más o menos adaptaciones en el espacio para evitar accidentes y que nuestra persona pueda sentirse cómodo y seguro.
En Koltin nos preocupamos por el bienestar de las personas y sabemos que la prevención es clave para hacerlo. Síguenos para más consejos.
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